Mediante convenio firmado con la Asociación Civil Manos Verdes del Peñón del Cimarrón, se ha puesto a disposición de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH) las 260 hectáreas que comprende la reserva natural Montecielo, con fines investigación y conservación.
El objetivo general del convenio firmado por el rector Roberto Domínguez Castellanos y Leopoldo Humberto Morales Messner, presidente de la asociación, es establecer las bases de colaboración institucional y académica en el ámbito de la docencia, investigación, conservación de la biodiversidad, educación ambiental, extensión académica, servicio social, prácticas profesionales y/o académicas y difusión de la cultura, enfocado a las áreas de ciencias biológicas e ingeniería ambiental.
La reserva Montecielo se localiza a ocho kilómetros de Tuxtla Gutiérrez y es un área que ha sido reforestada por más de 30 años, obteniendo resultados como la existencia de árboles de 30 y 40 metros de altura y ha dado lugar al desarrollo de flora nativa del estado, como orquídeas, y la ocupación de la zona por varias especies animales, explicó Morales Messner.
Roberto Domínguez Castellanos consideró que “este convenio será de gran impacto, por la importancia que tiene el trabajo que hay detrás de cada una de las instituciones y lo que pueden lograr juntas”. Además dijo, la reserva Montecielo “nos puede servir como un gran laboratorio para muchos proyectos que tenemos”, esto en referencia a las licenciatura en Biología, Ingeniería Ambiental y la que se abrirá en Arqueología.
Dentro de las especificidades del documento firmado se establecen compromisos en cuanto a capacitación y educación informal, investigación, difusión y extensión, servicio social y platicas profesionales, servicios académicos-profesionales, sistemas de información e investigación para la conservación.
El periodista Carlos Jiménez, dijo en nombre de Manos Verdes que uno de sus objetivos es el de crear una reserva en cada uno de los 118 municipios de Chiapas y contribuir a una conciencia social para la integración de los seres humanos y sus ecosistemas. “Con este convenio se abra un camino de esperanza para cristalizar este trabajo que se ha venido haciendo desde hace más de 30 años.”